Propuesta de la competencia de
liderazgo pedagógico a desarrollar en los maestros de Educación Básica
Proposal
of the pedagogical leadership competence to be developed in the Basic Education
teachers
*Pedro Manuel Roca-Piloso
**Luis Aníbal Alonso-Betancourt
*Universidad Laica
Eloy Alfaro de Manabí. Ecuador. Doctor en Ciencias Pedagógicas (Ph. D.).
Licenciado en Ciencias de la Educación. Correo: docente76@hotmail.com
ORCID: https://orcid.org/0000-0003-0468-2988
** Universidad de
Holguín. Cuba. Doctor en
Ciencias Pedagógicas (Ph. D.). Profesor Titular. Máster en Pedagogía
Profesional. Licenciado en Educación. Correo: lalonsob@uho.edu.cu ORCID: https://orcid.org/0000-0003-0989-746X
Resumen El presente artículo propone la
competencia de liderazgo pedagógico que se debe desarrollar en los maestros de
Educación Básica durante su formación inicial en el contexto ecuatoriano, a
través de la interacción y armonización contextualizada de los procesos
sustantivos de la docencia, la vinculación e investigación. La propuesta
constituye un resultado derivado de una investigación científica. Se sustenta
en el enfoque de formación profesional basada en competencias y sobre el
liderazgo relacionado con la dirección de procesos educativos. Fue concebida
mediante los métodos de análisis, síntesis, revisión de documentos, el enfoque
de sistema, el pre-experimento pedagógico y la prueba Chi-cuadrado (X2)
que permitieron constatar su validación en la práctica educacional. Puede
generalizarse a cualquier carrera de ciencias de la educación básica a nivel
nacional e internacional con la debida contextualización a las exigencias de
su proceso formativo. Palabras
clave: Liderazgo pedagógico; competencia,
Educación Básica |
Abstract This
article provides the pedagogical leadership competence that must be developed
in the Basic Education teachers during their initial training in the
Ecuadorian context, through the contextualized interaction and harmonization
of the substantive processes of teaching, linking and research. The proposal
is a result derived from a scientific research. It supports on the
professional training approach based on competences and on leadership related
to the direction of educational processes. It was developed through the
methods of analysis, synthesis, document review, the system approach, the pedagogical
pre-experiment and the Chi-square test (X2) that allowed verifying its
validation in educational practice. It can be extended to any career of basic
education sciences at national and international level with due
contextualization to the demands of its formative process. Keywords: Pedagogical leadership; Competence,
Basic Education |
Introducción
Veláz
(2017) considera que “la educación es una inversión social de primera magnitud,
no vende ni compra; pero construye, dignifica y valora”. (p. 1)
La educación trata de formar hombres y
mujeres que sean capaces de vivir a plenitud y con dignidad, asumiendo con
responsabilidad social sus funciones en la educación del ser humano para
transformar realidades, por eso es necesario que sus miembros tengan un
protagonismo que les permita definir sus responsabilidades, adquirir las
cualidades necesarias para distribuir y ejercer un liderazgo eficaz y hacer del
proceso de enseñanza-aprendizaje un espacio para la toma de decisiones.
En el año
2013, en el mes de noviembre entra en vigencia el nuevo Reglamento de Régimen
Académico que regula y orienta el quehacer académico de las Instituciones de
Educación Superior (IES) en el Ecuador en sus diversos niveles de formación. En este sentido, la
Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad Laica “Eloy Alfaro” de
Manabí (ULEAM) tiene como encargo social “formar profesionales en la docencia,
capacitados para la dirección del proceso de Educación Inicial, General Básica
y de Bachillerato, asumiendo un rol protagónico, con liderazgo en la sociedad
como educadores de las nuevas generaciones”. (ULEAM, 2013, p. 4)3
Dentro de las carreras de Ciencias de la
Educación de la ULEAM se encuentra la carrera de Educación Básica, la cual
tiene como encargo social el referido a “formar docentes capacitados para la
dirección del proceso educativo de los escolares de la Educación Básica, con
eficiencia, calidad y un elevado liderazgo pedagógico.” (ULEAM, 2013, p. 6)
Una de las
exigencias del encargo social del proceso de formación inicial de los
estudiantes de Educación Básica de las carreras de Ciencias de la Educación, lo
constituye desarrollar competencias de liderazgo pedagógico durante la
dirección del proceso educativo.
Freire, Govea y
Hurtado (2018) consideran que “hablar del liderazgo es también hablar de
valores, ya que éstos crean un sistema de comportamiento que es generalmente
aceptado por la sociedad.” (p.1), criterio que se comparte ya que constituye
una cualidad que debe tener un maestro.
Es por ello que resulta
necesario contribuir, desde el proceso de formación inicial, a desarrollar la
competencia de liderazgo pedagógico en los maestros de Educación Básica, como
una cualidad esencial que contribuye al cumplimiento de su encargo social, una
vez egresados.
El diagnóstico
realizado al liderazgo pedagógico como parte de la investigación realizada por
Roca (2017), permitió constatar las siguientes insuficiencias:
Ø No siempre logran gestionar y liderar cambios en los enfoques y estilos de dirigir el proceso
educativo de sus estudiantes en las instituciones educativas.
Ø Se manifiestan poco audaces y conformistas con la
aplicación de las normativas educacionales que regulan la dirección del proceso
educativo de sus estudiantes.
Ø No asumen su trabajo como un
desafío y sobre todo como un acto de humildad.
Ø Expresan dificultades para delegar y desarrollar al
grupo de estudiantes que atienden como futuros docentes, lo que le dificulta
conseguir aprendizajes significativos.
Ø No siempre actúan como un modelo a seguir, ni
comunican su visión de futuro, aspecto que limita el logro de un mayor
entusiasmo, compromiso e ilusión por parte del grupo de estudiantes que atiende
en la institución educativa.
Ø Se
aprecia falta de protagonismo, desde sus actividades docentes y demuestran
debilidad en la toma de decisiones, al evadir responsabilidades y delegarlas a
la parte administrativa.
Una de las causas que
generan esta problemática lo constituye la ausencia en el perfil del egresado
de la carrera, de la competencia de liderazgo pedagógico a desarrollar en estos
estudiantes.
Este resultado hizo pertinente realizar
una búsqueda en la literatura científica sobre la formación de competencias,
entre las que se resaltan, en los últimos cinco años, los trabajos de: Tejeda y
Sánchez (2012), Tobón (2013), Villaroel y Bruna (2014), Maury, Marín, Ortiz y
Gravini (2018), Ronquillo, Cabrera y Barberán (2019),
Martínez, Alonso
y Pérez (2019).
Estas
investigaciones reconocen que el liderazgo constituye una competencia genérica,
transversal, que debe caracterizar al perfil del egresado de cualquier carrera
universitaria; sin embargo, no se hace la propuesta de su estructuración
formativa en consonancia con las características del maestro de Educación
Básica.
Por
su parte, los estudios que han abordado el liderazgo permiten reconocer, entre
otros, los trabajos de: Uribe (2005), Ortiz (2005), Coronel (2005), Bolívar-Botía
(2010 a), Bolívar-Botía (2010 b), Morell, Bauzá y Marañón (2013); Gallego y
Gutiérrez (2014), Martínez e Ibarrola (2015); Mellado
y Chaucono (2016), Mellado y Chaucono
(2016), Mercedes (2016), Roca, Alonso y Moreira (2017); Roca y Alonso
(2017), Roca (2017), Sopó, Salazar, Guzmán y Vera (2017), Figueredo, Toledo y
Palanqué (2017), así como Freire, Govea y Hurtado (2018).
En estos estudios se aborda
el liderazgo enfocado hacia la dirección de procesos educativos, en los cuales
si bien se abordan criterios, indicadores, rasgos que lo tipifican, su
tratamiento y configuración como una competencia no ha sido suficientemente
sistematizado acorde a las exigencias del perfil del egresado de un maestro de
Educación Básica.
Es por ello que el presente
trabajo tiene como objetivo: proponer la competencia de liderazgo pedagógico a
desarrollar en el maestro de Educación Básica durante su formación inicial.
Materiales y métodos
Para la elaboración
del artículo se emplearon los siguientes métodos:
El análisis, la
síntesis, la inducción y deducción para el análisis de la literatura
científica, la justificación del problema, para comprender, explicar e
interpretar el desarrollo de la competencia de liderazgo pedagógico en la
formación inicial del maestro de Educación Básica.
El enfoque de
sistema para el diseño y propuesta de la competencia de liderazgo pedagógico a
desarrollar en el maestro de Educación Básica.
El pre-experimento
pedagógico según el enfoque cuantitativo asumido de Hernández, Fernández y
Baptista (2014), la prueba Chi-cuadrado (X2) y la observación al
desempeño docente para validar la propuesta de la competencia de liderazgo
pedagógico introducida y desarrollada en una muestra de 20 maestros de
Educación Básica en formación inicial del octavo semestre de la ULEAM.
Resultados y discusión
En esta parte se
ofrecen en primer lugar los referentes teóricos asumidos en la investigación,
la propuesta de la competencia de liderazgo pedagógico y el pre-experimento
pedagógico aplicado que permite constatar la validez de su aplicación en la
carrera de Licenciatura en Educación Básica en el Ecuador.
1.
Consideraciones teóricas sobre el desarrollo de la competencia de
liderazgo pedagógico.
El ser educador en esta sociedad del
conocimiento lleva consigo un reiterado esfuerzo para ejercer un impacto sobre
la formación de los estudiantes.
Las escuelas del siglo XXI son organizaciones
abiertas a la comunidad, en consecuencia, sus directivos no pueden dejar de
crear espacios para que todos asuman sus responsabilidades y juntos alcancen
los objetivos institucionales.
Relacionado
con lo anterior:
Las
instituciones educativas se convierten en centros organizados inteligentemente;
gracias al protagonismo que ejercen todos sus miembros; sin embargo, es
necesario que reconozcan los aspectos o
ámbitos que posibiliten el desarrollo del liderazgo de los docentes, generando
las condiciones para lograrlo en un ambiente de trabajo que promueva una
cultura de participación efectiva de los profesores para la mejora de su propio
quehacer y de los objetivos declarados en el proyecto educativo de la
institución escolar. (Uribe, 2005, p. 3)
En este sentido, Mellado y Chaucono (2016) consideran que “la
reestructuración de las concepciones docentes requiere de líderes pedagógicos
que transformen el centro educativo en un espacio de reflexión democrático que
propicie el cuestionamiento del pensamiento de los grupos profesionales que se
desempeñan en las escuelas.” (p.3)
En el lenguaje cotidiano, el término de
líder se aplica formalmente a quienes dirigen la organización desde dentro, y
también, en forma escalonada pero más remota, a quienes administran el sistema
en que se inserta la escuela (local o nacional, público o privado, religioso o
laico).
El líder “es aquel que se ha trabajado a
sí mismo y que está en condiciones saludables de guiar a otros en su propio
desarrollo”. (Mercedes, 2016, p. 16)
Al respecto, Mercedes (2016, p. 16),
realiza las siguientes reflexiones:
Reconoce
que el líder se haya trabajado a sí mismo, es decir, que busque desarrollarse
como persona, autoconocerse, potenciar sus virtudes y trabajar sus
limitaciones, aprendiendo a estar en
y con el mundo, en la búsqueda
constante del bienestar
personal. La intención de querer guiar a otros en su propio desarrollo, a que
otros puedan desarrollarse a sí mismos, potenciando las virtudes de las
personas y facilitando el camino de la mejora personal, siendo un modelo de autosuperación en la búsqueda del
bienestar propio, constituye un aspecto esencial que debe distinguir al líder.
(p.31)
El liderazgo es fundamental para el funcionamiento
de una organización compuesta por individuos que persiguen objetivos parecidos
y que además, poseen intereses personales.
En la
sociedad humana más evolucionada, la función del líder es simbolizar las normas
que mantienen unidos a sus seguidores y dar continuidad al grupo. De ahí que se
comparte el criterio que las “organizaciones… necesitan un estilo de autoridad
capaz de organizar, proteger, orientar, resolver conflictos y establecer
normas. El liderazgo se relaciona más bien, con la autoridad informal propia de
la dinámica oculta e incontrolable de las organizaciones”. (Morel, Bauzá y Marañón,
2013, p. 4)
El liderazgo
es entendido como “la influencia mediante la cual un individuo o grupo de
personas pueden lograr que los miembros de una organización colaboren
voluntariamente y con entusiasmo en el logro de los objetivos
organizacionales”. (Morel, Bauzá y Marañón, 2013, p. 5)
El liderazgo constituye una clase de influencia
mediante la cual se puede lograr que los miembros de una organización o
institución determinada colaboren y se sientan comprometidos por cumplir las
metas y objetivos planteados. Siempre se ha considerado que el líder a decir de
Morel, Bauzá y Marañón (2013) es
aquel que puede influir en las actitudes, opiniones o acciones de los
miembros de un colectivo porque estos deciden voluntariamente dejarse influir
por el líder. En este sentido, el líder ostenta siempre algún nivel de poder
carismático y/o de experto, para ser un líder no hay necesidad de estar dotado
de autoridad formal. (p. 5)
De ahí que se asume este
concepto y se considera a criterio valorativo que el liderazgo constituye el sistema
de influencias que ejerce un individuo o grupos de personas dirigidas a
organizar, proteger, orientar, resolver conflictos y establecer normas por
medio de la generación de ideas en común, la reflexión sobre el trabajo y la
creación de oportunidades que le permitirán lograr que los miembros de una
determinada organización colaboren voluntariamente, con compromiso y entusiasmo
en el logro de las metas y objetivos establecidos.
Por otra parte, el
liderazgo forma parte de las competencias profesionales que deben caracterizar
a un maestro de Educación Básica durante sus desempeños docentes.
La competencia profesional según Tejeda y Sánchez
(2012)
es una cualidad humana que se configura como síntesis dialéctica en la
vinculación funcional del saber (conocimientos diversos), saber hacer
(habilidades) y saber ser (valores y actitudes) que son movilizados en un
desempeño idóneo a partir de los recursos personológicos del
sujeto, que le permiten saber estar en un ambiente socioprofesional y humano en
correspondencia con las características y exigencias complejas del entorno”. (p. 21)
Se
asume esta definición debido al carácter personológico que la connota; es
decir, que se toma como centro al ser humano, privilegiándolo por encima de lo
funcional y lo operacional.
Las
competencias profesionales del Licenciado en Educación Básica, se interpretan
como cualidades que se configuran como síntesis de la vinculación del saber
(conocimientos sobre la dirección del proceso educativo), saber hacer (habilidades
para dirigir el proceso educativo) y saber ser (cualidades, actitudes y valores
profesionales de un docente), expresadas mediante su desempeño profesional
sobre la base de los recursos personológicos del sujeto, que le permiten
resolver problemas relacionados con la dirección del proceso educativo de los
escolares de la Educación Básica (incluyendo otros no predeterminados) con
compromiso y sentido de pertenencia.
La competencia profesional en su estructuración didáctica, incorpora
elementos de naturaleza formativa que se configuran en el estudiante de forma
dinámica y compleja y que son expresados por la versatilidad del desempeño que
él realiza, a partir de las exigencias y normas contextuales del entorno. En
este sentido, Tejeda (2011) considera que el desempeño profesional es el
modo
de expresión por el profesional del desarrollo alcanzado en las competencias,
las que cualifican y distinguen el cumplimiento de las exigencias
socio-laborales en los contextos donde cumple las actividades, tareas o roles
inherentes a la realización de las funciones y procesos asociados a la
profesión. (p.6)
El desempeño
profesional tiene un marcado carácter integrador y constituye el principal elemento de evidencia del desarrollo de las
competencias profesionales declaradas en el perfil de egreso del maestro
de Educación Básica. En tal sentido
las evidencias de desempeño son entendidas como “una manifestación concreta
brindada por el profesional, en un proceso de acercamiento a los criterios
establecidos para la competencia, que permiten inferir su calidad”. (Tejeda y
Sánchez, 2012, p. 12)
A partir de estos referentes teóricos asumidos
se reconoce que el liderazgo pedagógico constituye una competencia profesional
que debe demostrar el maestro de Educación Básica, como expresión de su
desempeño profesional durante la dirección del proceso educativo en las
instituciones de educación en las cuales se desempeñe profesionalmente.
Las competencias profesionales según Tejeda y Sánchez (2012) se
clasifican en: “profesionales específicas, básicas y transversales”. (p. 34)
A partir de este criterio de
clasificación asumido, se reconoce que el liderazgo pedagógico constituye una competencia
profesional de carácter transversal, ya que se forma mediante su articulación
con la lógica de interacción básica y específica del desempeño del docente de
Educación Básica en la dirección del proceso educativo.
Tejeda
(2016) considera que las competencias transversales
son aquellas que se articulan en la
lógica de la interacción del profesional en su actuación específica y básica.
Se interconectan con los niveles de desempeño del profesional en los diversos
contextos sociales y profesionales al interactuar con la lógica de los procesos
básicos, funciones y actividades de la profesión. (p. 35)
Por tanto, los rasgos que configuran las
evidencias de la competencia de liderazgo pedagógico mediante el desempeño
pueden tratarse, a partir de las potencialidades de los saberes que aprende el maestro
de Educación Básica durante su formación inicial en la docencia, la vinculación
e investigación, es decir, transversalizan todo su proceso de formación inicial
y se pueden desarrollar desde las competencias básicas y específicas que
establece el perfil de egreso de esta profesión.
La consulta de la literatura científica nacional y extranjera según
autores citados en la introducción del trabajo, permitió constatar que su
estructuración formativa y configuración didáctica no ha sido determinada en
específico para el maestro de Educación Básica, razón que hace pertinente realizar
su propuesta a continuación.
2. Competencia de liderazgo pedagógico:
una propuesta abierta a la reflexión y el debate
La competencia
de liderazgo pedagógico que se propone se determinó teniendo en cuenta los
referentes teóricos asumidos con anterioridad y el establecimiento de las
relaciones que se producen entre los
problemas profesionales que se manifiestan en la dirección del proceso
educativo (DPE) y las potencialidades educativas del contenido que aprende el
estudiante durante la docencia, la vinculación y la investigación que les permita
su solución, las cuales son
dinamizadas por la competencia de liderazgo pedagógico del maestro de Educación
Básica.
Los problemas profesionales en la
dirección del proceso educativo (DPE) se interpretan como la expresión de
conflictos, es decir, contradicciones que se producen en la planificación,
organización, ejecución, control y evaluación de actividades de carácter
docente, extradocente y extracurricular que se conciben desde la institución
educativa, el trabajo con la familia y la comunidad, dirigidas al desarrollo de
conocimientos, habilidades y valores en la personalidad del estudiante de la
Educación Básica, en correspondencia con los objetivos y fines de esta
educación.
Identificar
y enfrentar al estudiante para resolver estas contradicciones de carácter
esencial, constituye un espacio con influencias educativas muy favorables para
contribuir al liderazgo pedagógico, pues es precisamente en situaciones de este
tipo, en las cuales el estudiante puede asumir un papel protagónico, de
liderazgo en la propuesta de vías de solución ya sea por vía administrativa, de
la propia actividad docente sistemática que realiza durante la docencia, las
prácticas pre-profesionales y el trabajo de extensión universitaria o por el
resultado de su actividad científico – investigativa y la realización de su
trabajo de titulación.
Lo
anteriormente planteado puede orientarse a partir de un adecuado
aprovechamiento de las potencialidades educativas del contenido que aprende el
estudiante durante la docencia, la vinculación y la investigación.
Las
potencialidades educativas del contenido se interpretan como las posibilidades
concretas existentes para la dirección del proceso de interiorización y
exteriorización de conocimientos, habilidades, cualidades, valores y normas de
conducta social que hacen posible desarrollar el liderazgo pedagógico en el
estudiante, durante su formación inicial, la cual se desarrolla mediante la
docencia, la vinculación y la investigación.
El colectivo de docentes de los
sílabos de los ejes de formación de la carrera, los supervisores y profesores
orientadores que atienden al estudiante durante la práctica pre-profesional,
los miembros de la comunidad con los cuales interactúa durante su trabajo de
extensión universitaria, así como sus propios familiares implicados en este
proceso, deberán tener en cuenta el establecimiento de los nexos entre los
contenidos que caracterizan la diversidad de procesos sustantivos con los
contenidos que guarden relación con el liderazgo pedagógico en la solución de problemas
profesionales de la dirección del proceso educativo.
Las
relaciones anteriormente explicadas se dinamizan a partir de la competencia de
liderazgo pedagógico del maestro de Educación Básica, la cual constituye
la expresión de la integración de conocimientos, habilidades, normas de
conducta, cualidades, actitudes, aptitudes y valores que le permitirán ejercer
un sistema de influencias educativas sobre el grupo estudiantil que atiende y
otros sujetos implicados, en pos de alcanzar aprendizajes significativos, que les permitirán su
seguimiento y la colaboración con responsabilidad, laboriosidad, sentido de
pertenencia y entusiasmo en el logro de los objetivos, tareas y funciones
establecidas, así como en la realización de cambios en las vías y formas convencionales
por medio de las cuales transcurre el proceso educativo.
En este sentido, se propone desarrollar en los maestros de Educación
Básica la siguiente competencia de liderazgo pedagógico:
Ø Lidera procesos educativos
en el nivel de la Educación Básica con autoridad moral, protagonismo,
compromiso, sentido de pertenencia por la profesión, osadía, inteligencia,
creatividad, en trabajo en equipos que permita la generación de ideas en común
y de manera emprendedora, por medio de la aplicación de un sistema de
influencias educativas sobre su grupo estudiantil y demás miembros del
colectivo laboral y estudiantil de la institución donde labora desde la
docencia, el trabajo extradocente, comunitario y con la familia.
A continuación, se proponen los rasgos y evidencias de desempeño
asociadas a la competencia de liderazgo pedagógico que debe demostrar el
maestro de Educación Básica:
Ø Tiene conocimientos sobre
el liderazgo pedagógico, las teorías educativas y de dirección del proceso
educativo de los escolares de la Educación Básica en el Ecuador.
Ø Manifiesta habilidades
pedagógico profesionales relacionadas con la dirección del proceso docente
educativo de los escolares de la Educación Básica en el Ecuador.
Ø Siente un profundo interés,
respeto y amor por la profesión del magisterio.
Ø Manifiesta un profundo
compromiso con la institución educativa donde se desempeña.
Ø Gestiona y genera cambios
originales y novedosos en los enfoques y estilos de dirección del proceso
educativo en pos de mejorar su calidad con osadía, creatividad e inteligencia,
venciendo su desánimo ante los obstáculos presentados, las ideas negativas,
asumiendo riesgos y manteniendo un buen carácter antes las consecuencias que
estos puedan generar.
Ø Emplea métodos y estilos de
persuasión durante el desarrollo de sus actividades docentes por medio de los
cuales motiva, despierta el interés y el compromiso de su grupo estudiantil al
aceptarlos como son y no como él quiere que sean, convirtiéndose en un
paradigma a imitar por ellos de manera tal que los guía hasta lograr
aprendizajes significativos, así como el cumplimiento de objetivos y tareas de
estudio programadas.
Ø Manifiesta autoridad moral
ante sus colegas de trabajo, familiares del grupo estudiantil que atiende y
miembros de la comunidad, de manera tal que los compromete y logra a su vez que
estos cumplan con los objetivos y tareas planteados por la institución
educativa.
Ø Asume un papel protagónico
en la solución de problemas que se presentan en la dirección del proceso
educativo de la Educación Básica, demostrado en la toma de decisiones con
responsabilidad, laboriosidad, perseverancia, flexibilidad, creatividad y sin
delegar a sus compañeros de trabajo y la parte administrativa la propuesta de
posibles vías de solución.
Cada uno de estos rasgos que conforman las evidencias de desempeño
asociadas a la competencia de liderazgo pedagógico modelada con anterioridad,
deben ser tomados en consideración durante la solución de problemas
profesionales que se manifiestan en la dirección del proceso educativo y la selección
de los contenidos de la diversidad de procesos sustantivos (docencia,
vinculación e investigación) con potencialidades educativas para desarrollar
cada uno de ellos, como base para estimular el liderazgo pedagógico en la
formación inicial del maestro de Educación Básica.
Una vez presentada la competencia de liderazgo pedagógico, se muestran
los resultados alcanzados con su introducción durante la formación inicial del
maestro de Educación Básica de la ULEAM
3.
Resultados alcanzados en el desarrollo de la competencia de liderazgo
pedagógico en los maestros de Educación Básica en formación inicial de la ULEAM.
Esta última etapa del proceso investigativo se realizó mediante un
pre-experimento pedagógico según los pasos siguientes:
1. Reunión
de coordinación y aseguramiento.
Se realizó una reunión de coordinación
con los agentes implicados en la formación inicial del estudiante en cada uno
de sus procesos sustantivos: docencia, vinculación e investigación y mediante
un taller metodológico se realizó la fundamentación y presentación de la
competencia de liderazgo pedagógico propuesta, así como se trazaron las vías a
seguir para su desarrollo desde la docencia, la vinculación e investigación.
2. Selección
de la muestra estudiantil
Mediante el muestreo
aleatorio simple se seleccionó una muestra de 20 estudiantes del octavo
semestre de la carrera de Educación Básica de la ULEAM.
3. Diagnóstico
inicial del estado del liderazgo pedagógico de la muestra de 20 estudiantes.
Se realizó la
observación a los desempeños docentes de la muestra de 20 estudiantes
seleccionados, a partir de las evidencias de desempeño que se proponen en la
competencia. En la siguiente tabla se ofrece el resultado obtenido:
Tabla
1. Estado del desarrollo de la competencia de liderazgo pedagógico antes de
introducir la propuesta mediante la docencia, la vinculación e investigación
Fuente:
autores
Como se aprecia en la
tabla, se puede constatar que de 20 estudiantes, ninguno manifestó el liderazgo
pedagógico en la escala de muy bueno; cinco fueron evaluados de bueno para un
25,0%, siete fueron evaluados de regular para un 35,0%; mientras que ocho de
ellos fueron evaluados de deficiente para un 40,0%. Este resultado permitió
constatar que los estudiantes en las acciones propuestas para la dirección del
proceso educativo de la Educación Básica, no demuestran una adecuada
competencia de liderazgo pedagógico, que les permita desempeñarse como líderes
docentes.
4. Desarrollo de la competencia de
liderazgo pedagógico durante la docencia, vinculación e investigación.
Se procedió a introducir
la competencia de liderazgo pedagógico propuesta mediante talleres con los
docentes y en los diseños e implementación de proyectos que se orientaron a los
estudiantes durante la docencia, la vinculación e investigación en un semestre
lectivo.
3. Interpretación de
los resultados del diagnóstico de salida obtenido.
Una vez culminada la
realización de los proyectos del ejercicio del liderazgo pedagógico, se
procedió nuevamente a observar los desempeños docentes de los maestros de
Educación Básica en formación inicial, pero esta vez como diagnóstico de salida.
En la tabla 2 se
muestra el resultado obtenido:
Tabla
2. Estado del desarrollo de la competencia de liderazgo pedagógico luego de
aplicada la propuesta mediante la docencia, la vinculación e investigación
Fuente:
autores
De la tabla 2 se pudo
constatar que de 20 estudiantes, seis manifestaron un liderazgo pedagógico muy
bueno para un 30,0%; 11 fueron evaluados de bueno para un 55,0%, tres fueron
evaluados de regular para un 15,0%; mientras que ninguno fue evaluado de
deficiente.
Como transformaciones
cualitativas logradas en el
liderazgo pedagógico de los estudiantes se alcanzaron las siguientes: Demuestran que pueden ser
más capaces de gestionar y generar cambios originales y novedosos en los
enfoques y estilos de dirección del proceso educativo con osadía, creatividad e
inteligencia, venciendo su desánimo ante los obstáculos presentados y las ideas
negativas, asumieron un mayor protagonismo en la solución de problemas que se
presentan en la dirección del proceso educativo de la Educación Básica, demostraron
que pueden ser capaces de convertirse en un paradigma a imitar por sus
estudiantes y emplearon métodos y estilos de persuasión durante el desarrollo
de sus actividades docentes por medio de los cuales motivan, despiertan el
interés y el compromiso de su grupo estudiantil.
En la tabla 3 se muestra una comparación del estado del
liderazgo pedagógico de la muestra de estudiantes antes y después de introducida
y desarrollada la competencia que se propone en el trabajo.
Tabla 3. Estado
del liderazgo pedagógico de los maestros de Educación Básica en formación
inicial de la ULEAM antes y después de introducida la propuesta de la
competencia
p (X2) < α ; p (X2)
= 0.0175 < 0.05 ; diferencias significativas
Fuente: autores
Según se aprecia en la
tabla 3 se pudo constatar que:
Ø De
ningún estudiante de la muestra con evaluaciones de muy buen liderazgo
pedagógico, se logró un incremento a seis de ellos.
Ø De
cinco estudiantes que tenían un liderazgo pedagógico valorado como bueno,
ascendió a 11 luego de aplicado el procedimiento metodológico.
Ø De
siete estudiantes que estaban evaluados de regular en cuanto al liderazgo
pedagógico, se logró una disminución a solo tres de ellos luego de aplicado el
procedimiento metodológico.
Ø De
ocho estudiantes que tenían un deficiente liderazgo pedagógico, se logró que
ninguno se ubicara en esta categoría luego de aplicado el procedimiento
metodológico.
Con el objetivo de
constatar si las transformaciones cuantitativas alcanzadas en el liderazgo
pedagógico de los estudiantes antes y después de aplicado el procedimiento
metodológico fueron significativos o no, se aplicó la prueba Chi-cuadrado (X2)
a un 95,0% de confiabilidad (α), la cual obtuvo un valor de p (X2)
= 0,0175, el cual está por debajo del grado de confiabilidad asumido que es de α
= 0,05, por lo que se reconoce que las diferencias obtenidas son significativas.
Conclusiones
A partir de los aspectos
presentados se arriban a las siguientes conclusiones:
El liderazgo pedagógico constituye
una competencia profesional de carácter transversal que debe formar parte del
perfil del egresado del maestro de Educación Básica y ser desarrollada a partir
de las influencias educativas de la diversidad de procesos sustantivos:
docencia, vinculación e investigación que se llevan a cabo durante su formación
inicial.
La competencia de liderazgo
pedagógico constituye la manifestación del sistema de influencias
educativas que ejerce el maestro sobre su grupo estudiantil y demás sujetos que
intervienen en el proceso educativo que desarrolla en la
institución educativa donde se desempeña, por medio de la generación de ideas
en común, la reflexión, la organización, protección, orientación y solución de
problemas que se producen en dicho proceso, que le permitirán lograr que
colaboren con responsabilidad, laboriosidad, sentido de pertenencia y
entusiasmo en el logro de los objetivos educacionales establecidos .
El resultado obtenido con la
aplicación del pre-experimento pedagógico y la prueba Chi-cuadrado (X2),
demostraron a un 95,0% de confianza, que con la introducción y desarrollo de la
competencia de liderazgo pedagógico que se propone en el trabajo, se contribuye
al mejoramiento de los desempeños docentes de los maestros de Educación Básica
en los cuales expresan la cualidad de liderar procesos educativos en las
instituciones educativas en las cuales ejercen sus funciones docentes y educativas.
Referencias bibliográficas
Bolívar-Botía, A. (2010a). ¿Cómo el liderazgo
pedagógico y distribuido
mejora los logros académicos? Revisión de la investigación y propuesta. Magis,
Revista
Internacional de Investigación en Educación, 3(5), 79-106. Recuperado de
http://www.
redalyc.org/articulo.oa?id=281023476005
Bolívar-Botía, A. (2010b). El liderazgo educativo y
su papel en la mejora: Una
revisión actual de sus posibilidades y limitaciones. Psicoperpectivas, 9(2),
9-33. doi: 10.5027/
psicoperspectivas-Vol9-Issue2-fulltext-112
Coronel, M. (2005). “El liderazgo del profesorado en
las organizaciones educativas: temáticas para su estudio”. Revista Española de Pedagogía, 232(4).
Recuperado de: https://revistadepedagogia.org/monografico
Figueredo, M.; Toledo, T. M.; Palanqué, R. L.
(2017). Actividades para el desarrollo de la autoridad profesional en los
estudiantes de Matemática-Física. LUZ,
16 (2), 54-65, Recuperado de: https://luz.uho.edu.cu/index.php/luz/article/view/825
Freire, C.;
Govea, K. A.; Hurtado, G. (2018). Influencia de los
valores sobre los estilos de liderazgo en la Universidad Católica Santiago de
Guayaquil: Estilo transaccional y transformacional. Revista Espacios. 39 (19). Recuperado de: https://www.revistaespacios.com/a18v39n19/a18v39n19p06.pdf.
Gallego, M. J. y Gutiérrez, E. (2014). Liderazgo
Instruccional y distribuido en espacios virtuales de comunicación en educación
post-obligatoria. Revista Electrónica de
Investigación Educativa, 16(2), 97-118. Recuperado de http://redie.uabc.mx/vol16no2/contenido-gallego-gtz.html
Hernández
R., Fernández, C. y Baptista, P. (2014): Metodología
de la investigación. 5ta Ed.) México: EDAMSA IMPRESIONES S.A. de C.V.
Recuperado de: http://www.esup.edu.pe/descargas/dep_investigacion/Metodologia%20de%20la%20investigaci%C3%B3n%205ta%20Edici%C3%B3n.pdf
Martínez, A. y Ibarrola, S. (2015). Liderazgo del profesor: objetivo básico de
la gestión educativa. [Soporte
magnético]. Universidad de Navarra, España
Martínez, H., Alonso, L., y Pérez, C. (2019).
Formación de la competencia toma de decisiones económicas en los estudiantes de
Licenciatura en Economía. Opuntia Brava,
11(1), 117-131. Recuperado de http://opuntiabrava.ult.edu.cu/index.php/opuntiabrava/article/view/702
Maury,
S. C., Marín, J. C., Ortiz, M y Gravini. M. (2018): Competencias genéricas en estudiantes de educación superior de
una universidad privada de Barranquilla Colombia, desde la perspectiva del
Proyecto Alfa Tuning América Latina y del Ministerio de Educación Nacional de
Colombia (MEN). ESPACIOS (39). 1-12.
Recuperado de: https://www.revistaespacios.com/a18v39n15/a18v39n15p01.pdf
Mellado, M. E.; Chaucono,
J. C. (2016). Liderazgo pedagógico para reestructurar creencias docentes y
mejorar prácticas de aula en contexto mapuche. Educare.
20(1), 1-18. Doi: http://dx.doi.org/10.15359/ree.20-1.18
Mercedes, J.
(2016). Liderazgo
pedagógico. [Soporte magnético]. Universidad
Central del Ecuador, Ecuador.
Morell, P., Bauzá, E y Marañón, E. (2013). El
liderazgo educativo. Consideraciones generales. Did@scalia, 4 (2). Recuperado de: http://ojs.uo.edu.cu/index.php/Didascalia/Didáctica
y Educación.
Mulford, B. (2006). Liderazgo para mejorar la
calidad de la educación secundaria. Algunos
desarrollos internacionales. Profesorado. Revista de Currículum y Formación
del Profesorado, 10(1), 1-22. Recuperado de https://www.ugr.es/~recfpro/rev101ART2.pdf
Murillo, F. J. (2006). Una dirección escolar para el
cambio: Del liderazgo transformacional al
liderazgo distribuido. Revista Electrónica Iberoamericana sobre Calidad,
Efiacia y Cambio en Educación, 4 (4e), 11-24. Recuperado de http://www.rinace.net/arts/vol4num4e/art2.p
Ortiz, A.
(2005). Liderazgo Pedagógico. [Soporte
magnético]. Universidad Nacional de Colombia, Colombia.
Roca, P y Alonso, L.
(2017). Un modelo de desarrollo del liderazgo pedagógico en la formación
inicial del maestro de Educación Básica. Revista Electrónica Formación y
Calidad Educativa, 6(1). Recuperado de http://www.refcaleULEAM.edu.ec.
Roca, P. (2017). El liderazgo
pedagógico en la formación inicial del maestro de Educación Básica en la
Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí. (Tesis doctoral). Universidad de
Holguín, Cuba.
Roca, P., Alonso, L. y
Moreira, B. (2017). Guía didáctica de diseño de proyectos para el ejercicio del
liderazgo pedagógico en la formación inicial del Licenciado en Educación. Did@scalia:
Didáctica y Educación, 9 (2). Recuperado de http://runachayecuador.com/refcale/index.php/didascalia/
Ronquillo,
L. E., Cabrera, C. C. y Barberán, J. P. (2019): Competencias profesionales:
Desafíos en el proceso de formación profesional. Opuntia Brava, (11),
p.1-12. Recuperado de: http://www.opuntiabrava.ult.edu.cu/index.php/opuntiabrava/article/view/653
Sopó, G. R.; Salazar, M. B.; Guzmán, E. A.; Vera, L.
G. (2017). Liderazgo como competencia emprendedora. Revista Espacios. 38 (24). Recuperado de: https://www.revistaespacios.com/a17v38n24/a17v38n24p24.pdf
Tejeda, R. (2011). Las competencias
y su relación con el desempeño y la idoneidad profesional. Revista
Iberoamericana de Educación. 55 (4),
pp. 1-12. Recuperado de: http://www.search.proquest.com/ibero.edu/87654320359?=accountid=14475
Tejeda,
R. y Sánchez, P. (2012): La formación
basada en competencias profesionales en los contextos universitarios. (2da
Ed.). Ecuador: MAR ABIERTO. Recuperado de. https://issuu.com/marabiertouleam/docs/la_formacion_basada_en_competencias
Tejeda. R. (2016). Las competencias transversales,
su pertinencia en la integralidad de la formación de profesionales. Did@scalia,
7(6). Recuperado de: http://www.ojs.uo.edu.cu/index.php/Didascalia/
Tobón,
S. (2013): Formación integral y
competencias. Pensamiento complejo, currículo, didáctica y evaluación (4ta.
Ed.). Bogotá: ECOE. Recuperado de: https://www.researchgate.net/publication/319310793_Formacion_integral_y_competencias_Pensamiento_complejo_curriculo_didactica_y_evaluacion
Universidad
Laica “Eloy Alfaro” de Manabí. (2013). Proyecto
curricular de las carreras de Ciencias de la Educación. [Soporte
magnético]. Ecuador
Uribe, M. (2005). El liderazgo pedagógico en la construcción de la cultura escolar de
calidad: un desafío de orden superior. [Soporte magnético]. Universidad
Nacional Autónoma de México, México
Veláz, J. (2013). La formación docente y el liderazgo pedagógico. [Soporte
magnético]. Universidad Central de Venezuela.
Villarroel, V y Bruna, D. (2014): Reflexiones en
torno a las competencias genéricas en educación superior: Un desafío pendiente.
Revista Psicoperspectivas, (13), p.
22-34. Recuperado de: https://dx.doi.org/10.5027/psicoperspectivas-Vol13-Issue1-fulltext-335